Hace unos días os enseñé el cuelgapendientes que le he hecho a María con las telas que me sobraron del maratón que organizó Gra el verano pasado. Y ver terminado el cuelgapendientes me hizo reaccionar y decidirme a acabar de una vez la funda del nórdico. Tenía el top, pero me faltaba ponerle unas bandas laterales y montarlo. No era mucho trabajo, pero me daba mucha pereza. Así que aprovechando un par de días de vacaciones que he tenido esta semana, saqué todos los bártulos y me puse a ello. Y ya luce en la cama de mi hija.
Para la trasera he utilizado una tela que compré en Ikea, con un dibujo de unos labios rosas, fucsias y morados, por lo que la funda es reversible. En estas fotos podéis ver tanto la delantera como la trasera. Las hice con el móvil nada más terminarlo, y la luz le daba muy directamente, pero podéis haceros una idea. Con dos labios que me sobraron le hice un cojín de adorno para la cama, que no he fotografiado. La verdad es que esas bocas me dan un poco de grima, pero a ella le encantan.
En esta foto podéis ver también el cuelgapendientes. Mi intención era ponerlo encima de la cama, al lado del corcho, pero por comodidad lo pusimos a los pies.
Como podréis comprobar, el color favorito de María es el morado.